Los radares cuentan con la mejor resolución y cobertura, y ofrecen detecciones de nivel superior en todas las condiciones meteorológicas y de iluminación, incluso en entornos exigentes y “abarrotados”. Con tecnologías de radar de vanguardia, conformación de haces digital y una insuperable cantidad de canales, los radares proporcionan el rendimiento de detección ideal para todo tipo de amenazas.
Radares de libre mantenimiento hasta 11 km de cobertura y pueden identificar una persona de un animar hasta un Dron.
Los sistemas de radar en el ámbito de la vigilancia son herramientas tecnológicas avanzadas utilizadas para detectar, seguir y mapear movimientos, tanto humanos como de vehículos.
Su funcionamiento es muy sencillo:
El radar envía ondas electromagnéticas de alta frecuencia hacia un área específica.
Cuando las ondas emitidas por el radar chocan con un objeto, rebotan hacia el radar.
Este eco es captado por el receptor del radar.
El sistema de radar lo analiza y determina la ubicación, distancia, velocidad y dirección del objeto detectado.
Algunas ventajas de su uso sobre otros sistemas de vigilancia son:
Los radares son ideales para la vigilancia de grandes perímetros y pueden detectar intrusiones o movimientos anómalos a largas distancias, proporcionando tiempo suficiente para reaccionar ante posibles amenazas.
A diferencia de las cámaras o sensores infrarrojos, los radares funcionan eficazmente bajo cualquier condición climática, incluyendo niebla, lluvia, nieve o polvo.
Pueden seguir múltiples objetivos simultáneamente, lo que es crucial en áreas con alto tráfico de personas o vehículos.
Cuando se integran con sistemas de cámaras, el radar proporciona una localización precisa de los objetivos, permitiendo que las cámaras se enfoquen automáticamente en la amenaza detectada para una identificación y evaluación más detallada.
Los sistemas de radar avanzados pueden diferenciar entre tipos de objetivos (por ejemplo, humanos, animales, vehículos), lo que ayuda a reducir significativamente las falsas alarmas.
En el contexto de la seguridad, los radares se utilizan para monitorear espacios como fábricas, infraestructuras críticas como aeropuertos, etc. y son muy efectivos, ya que proporcionan una vigilancia constante y fiable.